El Alipori - Correo Semanal de Alfonso Portabales - Publicación #37
Caracol col col, saca los cuernos al sol
Mientras pensamos en el acto de escuchar, no podemos oír con claridad.
A.Watts
Escribo este correo desde un mundo de cajas. Como Super Mario, pero con libros y mierdecillas en vez de monedas dentro que hacen “clinc” y flores que te convierten en un monstruo de fuego.
Hoy, probablemente, venga un Alipori corto.
Hay muchas teorías — esotéricas, hindúes, etc. — que hablan de los cuatro cuerpos del ser humano (físico, emocional, mental y espiritual). Otras añaden tres más, hacia planos más religiosos. En cualquier caso, yo desde hace unos días sólo he usado el físico, y todo lo demás ha ido en una especie de piloto automático.
Normalmente no me es difícil saber de qué hablar. Sale como el árbol de la semilla, él solito. Hoy exprimo el teclado y salen pepitas de limón. Pero bueno, ahí le voy ganando líneas.
Aunque, en realidad, han pasado muchísimas cosas. Ayer estuvimos haciendo un ensayo para un coro de góspel para que esté en nuestro nuevo disco. El miércoles que viene entro a grabar otro (que aún no me sé muy bien). Y, sobre todo, el viernes pasado ya firmamos la compra de la casa. Blanca y yo ya somos propietarios. Además de la casa, también de unos olivos en el sureste de Madrid (insertar Gif de Kim Kardashian lanzando dinero).
Esperad en febrero/marzo un poco de spam para que compréis nuestro aceite.
A menos que no llueva más, claro, que es lo que parece. Como dicen los viejos: “Buen tiempo cuando toca mal tiempo, es mal tiempo”.
Y en eso estamos. Haciendo la danza de la lluvia para no tener cuatro palos secos.
¡Ah! Y también estaba pensando en hacer camisetas/tazas con imágenes del Alipori. ¿Qué mejor que vestir con diseños tan bonitos como este? (Insertar emoji de bolsa de dinero).
No llueve y hace demasiado calor
El calor da gusto, pero coño, vamos hacia un buen lío.
Sólo esto como elemento principal de ocupación mental últimamente.
El cuerpo emocional
Antes mencioné lo de los cuatro cuerpos. Aunque es evidente que esos cuerpos no están ahí en cuanto a una perspectiva puramente materialista (no de comprar cosas, sino de “lo que no se puede observar o medir, no es”), que puede ser cierta, yo qué sé, es una buena forma de imaginarse una estructura resumida para el cuerpo humano.
Bueno, pensé en esta idea en base a un meme que encontré en internet. Este:
Pretende ser una captura del programa americano “Fear Factor”, en el que los concursantes deben superar pruebas absurdas y terroríficas como meter la mano en un terrario lleno de escorpiones. En este caso, pone: “En el siguiente desafío, el concursante tendrá que sentir sus sentimientos en lugar de tratar de intelectualizarlos”.
Quizá esta aproximación tetracorpórea sea interesante en ese sentido. Cada cosa, a su cuerpo. Sin dejarse dominar y volverse un pelele de lo externo, obviamente. Lo interno tiene que mandar en una suerte de balance casi imposible.
Porque yo de esto soy culpable. Parece más fácil racionalizar si es lo que siempre se te ha dado bien.
En esto siempre pienso en la construcción de personajes en los videojuegos, en la que uno reparte puntos entre fuerza, inteligencia, carisma, resistencia…
Parece que antes de nacer uno reparta puntos entre los cuerpos, pero claro, no por ello se deben evitar usar los otros y vivir las experiencias que da la vida, que al final la vida son X años (pocos) y habrá que aprovecharlos.
El Literapori: Libro recomendado de la semana
Hoy quería recomendar La dependienta, de Sayaka Murata. Aquí, la versión en inglés, que, para variar, tiene una portada 50 millones de veces más bonita.
Trata sobre una mujer de treinta y pico (ya vieja para estar soltera según el estándar japonés) un poco autista, que, a pesar de la presión externa, es feliz viviendo sola y siendo dependienta en una tienda tipo konbini japonés (los 7-eleven, etc., parecidos a las tiendas, al menos en Madrid, conocidas como chino).
Diría que el tema principal es lo difícil que a veces se hace el mundo, con tantas expectativas y normas.
Se lee fácil, como buen libro japonés en primera persona.
Tiene, sin duda, el sello aliporiano de calidad.
Los 40 Principaliporis: Música recomendada de la semana
Hoy, en los 40 Principaliporis, y a pesar de mi reticencia general a todo lo nostálgico en el mundo de lo creativo, traigo una canción del 1999, culmen del género conocido como “cantaditas”.
La música electrónica empezaba a hacerse popular entre las masas. En la época no me encantaba esta música. Será que me hago viejo (o menos nuevo).
¡Adiós!
¡Gracias por leer!
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Todo por un sub gratuito. Qué mundo este tan fácil el del siglo XXI.
Para los recién llegados o el que los quiera repasar, los antiguos Aliporis están disponibles aquí.
Como diría el gran poeta M.: “Un abrazo a quien quiera recibirlo. Gracias.”
¡Hasta pronto!