El Alipori - Newsletter de Alfonso Portabales - Publicación #9
Escribir es intentar adivinar lo que uno escribiría si escribiese.- Marguerite DurasHoy:IntroducciónEntrevistas a escritores #2 - Nicolás CarroEnlaces (Música, libros, y películas) #9Llevo unos cuantos números saliendo con retraso. Pido perdón.Pero, a cambio, esta es una idea que pensé hace tiempo y escribí y borré y que creo que puede aplicar a más gente (en el fondo, nadie es tan raro):El llanto, cuando es emitido con fuerza, suena muy parecido a la risa.Esto me ha llevado a pensar que casi siempre - incluso mientras está sucediendo - tiendo a analizar mi propio acto de llorar como performativo - una voz de fondo diciendo "¿qué haces? No es para tanto" -, mientras que con la risa, por lo general más social y performativa, no. Y que si alguien me dijese "¿qué haces? No es para tanto" mientras me río, le consideraría un idiota.¿Por qué esa diferencia?Inherentemente, la risa es buena, la lágrima mala. Hay algo en la tristeza que a nivel social hay que esconder, supongo que por no ser repudiado por los demás. Es cierto que a nadie le agrada alguien que llore todo el rato.(Sí, soy consciente de que hasta aquí estoy hablando del argumento de la peli de Pixar Del Revés, pero aquí cambia.)Observando esto, como sucede al observar cualquier idea o comportamiento que uno genere en piloto automático, uno da el primer paso en alterarlo. Quizá no haya otra forma. Pasada la paradoja de observarse a uno mismo (ser observador y observado), y entendiendo que uno no es sus pensamientos ni sus reacciones, sino el espacio entre medias, yo, por lo menos, he llegado a aceptar esa reacción mía como algo que está ahí, y solo eso le ha restado fuerza.
Entrevistas a escritores #2 - Nicolás Carro
Alfonso Portabales
Hoy el invitado es Nicolás Carro, autor de “Una Buena Noche”, una novela que transcurre en la India, en particular en la ciudad de Calcuta. El protagonista, un chico sin nombre, recuerda, mientras muere desangrado contra una pared, el tiempo en que estuvo de voluntariado y en el que, mientras descubría el país, descubría el amor.
Hola, Nicolás, bienvenido a El Alipori.
Nicolás Carro
Hola, gracias por invitarme
AP
Tu libro está escrito con un estilo muy peculiar, supongo que te lo habrán dicho antes. A mí se me hace un estilo casi opuesto a esos torrentes de palabras que podían escribir Joyce o Kerouac. Para el que no lo haya leído, es un libro en primera persona en el que, al menos que yo haya visto, no hay ninguna coma, y se desarrolla en frases cortas separadas por puntos. ¿Por qué elegiste este estilo? ¿Buscabas comunicar algo en particular (alguna emoción o algún estado de ánimo) o simplemente te salió así?
NC
Mi escritora favorita es Marguerite Duras, que es una escritora francesa que murió en el 96. Tenía una manera de escribir muy poética, de frases cortitas. Lo primero que leí de ella fue en la película Hiroshima, Mon Amour. La manera en que está escrita es de frases muy cortitas, muy punzantes, con mucha razón de ser. Me impresionó muchísimo. Leí sus libros y dije, ¿se puede escribir así? Lo que había leído hasta el momento era, siendo diferente cada uno, en general, muy similar unos a otros. Después de leer a Duras, me dije ¿se puede escribir así? Sobre todo a nivel del estilo. Fue más por eso que porque el libro tenga una razón de fondo a nivel de la historia. Fue más algo como: ah, mira, se puede hacer, lo voy a hacer.
AP
Fue un estilo que te llamó la atención y que viste que podías hacerlo, ¿no?
NC
Sí, también al ser el libro muy introspectivo, muy de emociones, pues me dije, también va bien este tipo de cosas, que la forma vaya un poco de la mano con lo que intento explicar y con la historia.
AP
¿Tiene que ver también con el hecho de que sea tan introspectivo el libro el que ningún personaje tenga nombre?
NC
Esto me lo puse como handicap a mí mismo a la hora de escribir. Me gustan mucho las historias que consisten, tanto en libros como en cine, en dos personas durante hora y media o doscientas páginas, y poco más, que hablan de la conexión entre los personajes. Como no tenía un elenco muy grande de personajes, me dije, pues puedo hacer como en Lost in Translation, o como muchos libros de Duras que no tienen nombre los personajes y se llaman él o ella. La escritora Duras hace mucho esto, libros de ciento cincuenta páginas, que sólo tratan sobre la relación entre dos personajes. Quizá ella es más tormentosa y más oscura y yo soy algo más relajado. Pero, sí, respecto a los nombres, pensé que no los necesitaba, porque cuando hablo de él sabes de quién hablo y cuando hablo de ella, sabes de quién hablo. Esta forma me parece que queda más poética y que acompaña al tema del libro.
AP
Y cualquiera se puede identificar con ellos, porque al ser ella y él…
NC
(Risas) Sí, abarco a la gente en general. Al ser ella y él casi cualquiera se puede identificar. A veces, sí que es verdad que aparecen otros personajes, pero no es un elenco muy largo, por lo que puedo usar nombres relacionados con los dos personajes principales “el amigo de él”, “la amiga de ella”, ya que ellos dos son los ejes principales del libro. Es curioso como ejercicio de escritura y me lo pasé muy bien.
AP
En ese sentido, a mí también me atraen mucho las películas que te preguntan de qué van y no sabes decirlo exactamente. Como puede ser In the Mood for Love, que más que trama tiene un ambiente que es bonito.
NC
Exacto.
AP
Esta pregunta puede valer para cualquier libro, pero ¿qué te llevó a escribir este libro y no otro? ¿Había algo que querías decir? ¿Algo que tenías atascado dentro o que querías comunicar al mundo de ti o de la forma en que ves el mundo?
NC
Sí, el libro nace de dos experiencias personales. La primera, que es la fundamental… El libro lo escribí de abril a diciembre de 2017, más o menos, y en julio del 2016 estuve un mes en Calculta, en la India, un año antes de escribir el libro, haciendo voluntariado. Para la gente que no lo haya leído, hay muchas similitudes con lo que pasa en el libro. La India es un país que hay que ir preparado, no es como ir a Londres. Es un país duro, complicado… Y más si haces un voluntariado y te encuentras con situaciones difíciles. El viaje lo hice por interés personal, y sobre todo por la experiencia vital de viajar. Al volver, teníamos que hacer una memoria de una página para la universidad, para poder obtener los créditos. Claro, al hacerlo, me di cuenta de que esas 300 palabras no me eran suficientes. De ahí, pasaron 6 meses para que empezase a escribir. ¿Qué pasó? Que me enamoré de una chica y no fue bien (ríe). Y, como siempre en la literatura, la gente triste… Escribí el libro para intentar explicar una historia de amor que mezcla esas dos experiencias, la mía en la India y que me rompiesen de corazón. Suena un poco tópico, pero es verdad. Estaba triste y no sabía qué hacer, así que escribí el libro.
AP
Sí, a veces parece que escribir o hacer ficción, aunque, como dicen, nada es ficción, porque te vas basando en tu experiencia y en la gente que conoces y demás, es algo muy terapéutico. Como que al ponerlo en el papel, te lo quitas de encima de alguna forma.
NC
Sí. Recuerdo que un par de semanas después de “obtener el no”, por decirlo de alguna manera, me dije, ya, tengo que hacer algo, y me puse a escribirlo. Y lo bonito es que cuando tengo 80 años o la edad que tenga, y vea el libro “Una Buena Noche”, pensaré en esas dos experiencias, cuando fui a la India, y cuando me rompieron el corazón. Siempre será un momento vital muy específico que podré recordar.
AP
Por último, me gustaría hacerte una ronda rápida de preguntas rápidas. 3 libros que te encantaron sin que lo esperases y 3 libros que te parecieron insufribles.
NC
Me gustaron mucho (risas), te va a parecer increíble, pero Come, Reza, Ama, que lo descubrí en la India y me pareció interesante y tenía mucha relación con lo que estaba viviendo. Otro que me encantó fue Orgullo, Prejuicio y Zombis. Es una experiencia increíble. Hay partes que piensas que sobran, pero hay otras que piensas ¿por qué me está gustando tanto esto? Y un tercero… No te sé decir ahora. Libros que no me han gustado, quizá de Marguerite Duras, aunque sea mi escritora favorita. Tiene uno que se llama El Amor que, madre mía, Marguerite. Pero alguno tenía que tener malo.
AP
Si tuvieses que salvar la literatura de tres países y que toda la demás desapareciera, ¿qué países serían?
NC
Salvaría la francesa por Duras, básicamente, porque me gusta mucho.
AP
Menos El Amor.
NC
(Risas) Menos ese, sí. La estadounidense, sobre todo por Amy Hempel y Elizabeth Gilbert, la de Come Reza Ama. Y quizá la española, por salvarme a mí. Si no… (Ríe)
AP
¿Qué libro que hayas leído querrías haber escrito?
NC
Uno que me encanta es Ese Amor, no El Amor, Ese Amor (ríe), que está escrito por Yann Andréa, que fue, durante muchos años el amante/confidente de Duras. El libro relata su relación con ella. Y me encantaría haberlo escrito por haber vivido esa relación tan cercana con ella, y lo difícil y pasional que podía ser.
AP
¿Qué personaje de ficción querrías haber sido?
NC
Pensando en lo audiovisual, me vienen más cosas de series que de literatura. Un personaje que me encanta es John Locke, de Lost. Es un personaje que como espectador da mucha ternura por lo complicada que ha sido su vida. Cree que es su misión en la vida estar en esa isla. Su evolución es increíble y está muy bien hecha. Tiene unas flaquezas y unas debilidades y unas ganas de conseguir algo que lo hace muy humano y muy rico.
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Enlaces (Música, libros, y películas) #9
Bruno Mars y Andeerson .Paak se han unido en este proyectazo que es Silk Sonic. Esta semana le he estado dando en bucle. Hasta el bailecito es bueno.
Hace unos días vi The Batman. Me gustó más de lo esperado. La canción de Nirvana entra muy bien, y el hecho de ver un Batman sin mucha experiencia cagándola y aprendiendo es divertido. El único fallo: No para de llover y todo el mundo viste con cuero. Se les va a estropear.
¡Gracias!
Una semana más, muchas gracias por leer.
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